“Cuando todo el mundo se va de la oficina es cuando puedo concentrarme y trabajar de verdad.”

“Me cuesta delegar, tardo más en explicar lo que quiero que en hacerlo yo mismo.”​

Detrás de estas frases tan comunes, hay un serio problema de foco y organización. Nos cuesta mucho generar entornos de trabajo que nos permitan trabajar con calma y concentración. Nos cuesta mucho encontrar el momento para planificar, diseñar y decidir el camino que debemos tomar.

El problema es que si no sabemos a dónde vamos, cualquier camino nos sirve. Y cualquier camino nos va a hacer sufrir.

Durante años ése fue mi problema. El trabajo engullía todo mi tiempo, mis relaciones, mis rutinas, mi salud,…

Ahora ayudo a las empresas a generar y mantener espacios de claridad, inspiración, cooperación y enfoque compartido.

¿Y eso cómo se hace?

Diseñaremos un plan enfocado a las áreas de mejora específicas de tu equipo y te ayudaré a implementarlo y a mantenerlo.

Estos planes generalmente incluyen:

  • Acciones para ganar tiempo:
    • Gestión efectiva de interrupciones para mejorar la capacidad de concentración de todos los miembros el equipo. Esto permite aumentar el tiempo efectivo de trabajo de los colaboradores y la calidad de sus resultados en menor tiempo.
    • Gestión efectiva de reuniones. Suele ser muy fácil que las reuniones se vayan de las manos. Implantaremos pautas para mantener el control y conseguir que de cada reunión nazca un plan de acción claro en el menor tiempo posible.
    • Gestión efectiva de responsabilidades. Formación en metodologías de productividad que mejorarán el control y ejecución de las responsabilidades individuales.
  • Acciones para ganar claridad:
    •  Comunicación efectiva. Las palabras generan estados de ánimo. La labor de un líder es conseguir que cada colaborador ofrezca lo mejor de sí mismo. Comunicarnos conscientemente nos ayuda a fomentar la implicación de nuestro equipo, evolucionando hacia una delegación efectiva de responsabilidades.
    • Formación en técnicas de gestión de proyectos.
    • Propósito, misión y valores. La exploración de para qué hacemos lo que hacemos, cómo soñamos que sea y los principios que van a impregnar nuestras decisiones es el motor definitivo para que un equipo evolucione. Nos permite
      • tomar buenas decisiones fácilmente
      • seleccionar a los clientes que nos harán crecer
      • enfocar nuestros esfuerzos en lo verdaderamente importante
      • definir exactamente qué se espera de cada miembro y poder transmitirlo con claridad
      • seleccionar a los colaboradores adecuados
      • retener el talento del que ya disponemos.

Liderar un equipo bien engranado no sólo te permitirá evolucionar profesionalmente, con clientes satisfechos y colaboradores involucrados y motivados.

También conseguirás tiempo de calidad para dedicarlo a tus rutinas saludables, tus relaciones,… a lo que realmente importa.

Si con lo que has leído hasta aquí crees que te puedo ayudar, envíame un mensaje con el siguiente formulario.

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Si lo prefieres, llámame al 634542142.

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